El Juego de mi Vida
Cada uno de los pasos que he dado los he experimentado como juegos, en los cuales he perdido y... la mayoría de las veces ganado.
domingo, 24 de abril de 2016
martes, 19 de abril de 2016
DÍA CHANCACA
Así como la gotita que cayó en la
ventana de la Gloria Benavides, una pequeña nube me trajo el recuerdo de aquél
día lluvioso en que quise sorprender a mi marido con sopaipillas pasadas.
Estuve tres días planeando el banquete. Compré cada cosa
muy organizadamente según sus características perecederas. De este modo me hice
de zapallo, manteca,
chancaca, maicena, etc.
Con mucho entusiasmo busqué recetas entre clientas y
almaceneros de la cuadra, entre las
revistas viejas, innumerables recortes
de revistas y todos los reversos de
etiquetas, que se han encontrado de paso
por mi vida, hasta que encontré una muy buena en que, por lo menos, sus ingredientes fueron reconocidos por mi
escasa experiencia culinaria y cuya preparación no requería de aparatos
sofisticados, tales como pesas de exactitud, hornos con medidores de
temperatura o cocinas de espacios kilométricos.
Según las medidas de los componentes, sólo me estaban faltando unas varias porciones de manteca, así que el mismísimo día lluvioso, obviamente bajo la lluvia, procedí a la búsqueda de tan necesario elemento.
Todo cerrado. Algo me indicaba que no debía hacer dicha
compra, pero como buena analfabeta de
intuición fui porfiada y recorrí y
recorrí un barrio aún inexplorado, hasta encontrar lo buscado. Corrí a la casa
donde se cocinaba el zapallo en mi peligrosa ausencia y me dispuse a ensuciar
el libro de recetas mientras practicaba la magia gastronómica.
Hallando que 4 docenas de sopaipillas eran demasiadas
para nosotros dos solitos, decidí rebajar los ingredientes a la mitad. Sin embargo, a la hora de los descuentos
olvidé la parte mantecosa. Al principio no me di cuenta, pero mientras amasaba
notaba demasiado-demasiado un no sé qué. Vamos echándole harina, vamos friendo.
Las sacaba de la sartén y se desmoronaban como tortitas de arena. Me dije: “las
paso por la chancaca y pasan piola”. Porque la salsa aquella, sí que me quedó
muy buena!
Menos mal, que como siempre, sin proponérmelo estaba
preparada para la adversidad y cuando llegó la hora de la verdad, me atreví a
sacrificar y poner a prueba la honestidad de mi amado esposo. Era una mazamorra
asquerosa que él sólo atinó a describir, para no decirme lo innegable.
Como lo quiero tanto, no fui capaz de aceptar que
probara un segundo bocado y le retiré el plato. “no te preocupes”, le dije, (igual un poco achaplinada) “mañana puedo hacer otra cosa con esto mismo”. No
quise forzarlo a mentirme. ¡Pobrecito! Pero estuvo a punto...
Y probablemente para no caer en tentación, toda esa
semana estuvo llegando excesivamente
tarde como para comer. Pero mi propósito inicial, de sorprenderlo con sopaipillas en un día
lluvioso, lo logré de todas maneras... Y
con las sobras hice una torta de miedo… ¡A la que le hizo rechupete!
5 de junio 2003
GLOSARIO
1. Gloria
Benavides: cantante popular chilena, de la década de los 60. Actual comediante
del programa de Don Francisco en Miami, llamada La Cuatro. Tenía una canción
nostálgica llamada “la gotita”, que trataba de una adolescente que se quedaría
sin salir con su novio, al prever que una gotita de lluvia en su ventana
anunciaba una lluvia de padre y señor mío.
Y esta canción decía así... “era
una gotita... “ (¡Jajaja!)
2.
zapallo:
calabaza, como aquella de la carroza de la Cenicienta
3.
manteca:
grasa de animal (irracional)
4.
chancaca:
azúcar sin refinar prensada.
5.
maicena:
fina harina de maíz
6.
cuadra:
manzana o cuadrante separado por calles.
7.
“Aim
zinging...”: cantando bajo la lluvia en “inglés”
8.
barrio:
sector cercano a la casa de uno.
9.
sopaipillas:
masa frita, plana y redonda, hecha con harina de trigo y zapallo, que se sirve
con el té, cubierta de salsa dulce, ketchup, mostaza o secas.
10. tortitas: pasteles
11. pasar piola: pasar
inadvertida
12. salsa: agregado semilíquido
que acompaña algo no muy atractivo (si no, para qué el maquillaje...)
13. mazamorra: según el
contexto, una porquería.
14. achaplinada: viene de
Chaplín y significa íntimamente frustrada
15. torta: pastel como el de
bodas o cumpleaños.
16. rechupete: disfrutar un
comestible hasta llegar a chuparse los dedos.
Primavera Silva Monge
5 de junio 2003
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